El mundo de la ciencia en el siglo XIX estaba dominado por una narrativa masculina. Pero en las sombras, Eunice Newton Foote estaba haciendo descubrimientos revolucionarios sobre el efecto invernadero. 

Sus investigaciones no solo arrojaron luz sobre el cambio climático sino también sobre el sesgo de género en la ciencia. La historia a menudo ha pasado por alto las contribuciones de Foote. A pesar de su trabajo fundamental, otros recibieron el crédito por descubrimientos similares. 

La historia de Foote es un recordatorio de las luchas que enfrentan las mujeres en campos dominados por hombres. Celebrar y reconocer el trabajo de Foote es esencial. Su legado, aunque oscurecido, sigue siendo una inspiración para todas las mujeres en ciencia y otras áreas.